Sostenibilidad y la Industria de la Avellana: ¿Qué Se Está Haciendo?
Con varios gigantes de la industria optando por formas cada vez más sostenibles de producir cultivos, el sector de la avellana ha conseguido bastantes ejemplos de desarrollo sostenible en los que fijarse a la hora de decidir convertirse en un cultivo con una cadena de suministro 100% sostenible.
Al fin y al cabo, los cultivos en sí no requieren ninguna práctica que se considere perjudicial para el medio ambiente ni para las comunidades agrícolas que los cultivan. Sólo requieren un poco de atención y concienciación para el bien de la sociedad y del planeta para garantizar que las cosas vayan bien.
Gracias a los esfuerzos de varias empresas por hacer que la industria de la avellana sea sostenible, tenemos varios ejemplos de lo que se ha hecho para garantizar que esta industria vaya en la dirección correcta.
1.Plantas de Procesamiento de Avellanas 100% Solares
Desde la finalización de la primera planta de procesamiento de avellanas que funciona 100% con energía solar en 2017, varias empresas de avellanas de Estados Unidos y otros países han optado por ser autosuficientes a la hora de suministrar electricidad a sus plantas.
En realidad, se trata de una forma muy eficaz de garantizar que haya cero residuos durante el procesamiento de las avellanas. No sólo las instalaciones son más eficientes desde el punto de vista energético, sino que también existe la oportunidad de eliminar casi por completo cualquier huella de carbono que estas fábricas puedan estar produciendo.
2. Mejor Gestión del Agua y Sistema de Retención
Los avellanos en sí tienen un impacto muy bajo en la tierra en la que se cultivan y tienen beneficios medioambientales mucho, mucho mayores. Para empezar, los avellanos necesitan menos agua, por lo que es muy posible que las regiones con menos agua puedan cultivar avellanas con facilidad. Se pueden utilizar técnicas de gestión sostenible del agua para regar estos cultivos con aspersores en lugar de inundar todo un campo.
3. Mayor Cuidado de los Trabajadores
Más del 70% del suministro mundial de avellanas se produce en Turquía, donde la cadena de suministro acaba siendo bastante turbia, ya que los trabajadores se desplazan a las granjas de avellanas para obtener un empleo estacional durante la temporada de recolección.
Sin embargo, los principales proveedores de avellanas han tomado nota de la condición de estos trabajadores y, con la ayuda de la Asociación para el Trabajo Justo (FLA), están trabajando para erradicar el trabajo infantil y garantizar que los trabajadores reciban un salario digno. El objetivo es crear una cadena de suministro de avellanas 100% trazable, y con la ayuda de muchas ONG, gobiernos y otros gigantes de la industria, este objetivo se está alcanzando de forma lenta pero segura.